Este tipo de prueba consiste en reunir a un grupo de candidatos a los cuales se les expone un problema al que han de buscar una solución.
Mientras argumentan, los encargados del proceso de selección les observan y en la mayoría de los casos les graban para poder analizarlos con mayor detenimiento posteriormente.
En este tipo de prueba, además de contrastar los datos curriculares, se analizan diversas cualidades de los candidatos como por ejemplo su capacidad de reacción ante situaciones profesionales y personales, su desenvolvimiento en sociedad, capacidades de liderazgo, agilidad verbal o toma decisiones.
Algunas de las propuestas más utilizadas para encontrar soluciones grupales son las siguientes:
Ejemplos de discusiones grupales que se proponen con el objetivo de observar si los candidatos se adaptarían correctamente a la cultura de la empresa.
- LA ISLA DESIERTA. Se presenta a los candidatos una serie de objetos de los cuales solamente pueden escoger un número muy limitado para llevarse a una isla desierta, primeramente deben elegir los objetos individualmente y después deben ponerse de acuerdo para seleccionar los objetos en una discusión grupal.
- LA CÁRCEL. Los candidatos están prisioneros en una cárcel de la que deben huir, se les proporcionan varias rutas. El equipo en conjunto debe decidir la más conveniente analizando sus ventajas e inconvenientes.
- CONSTRUCCIÓN EN ZONA PROTEGIDA. Se indica a los candidatos que en una zona protegida con gran riqueza medioambiental, una empresa quiere construir un hotel, dicho hotel sería una fuente de empleo y prosperidad para los habitantes de la zona. Los candidatos deben debatir sobre la ética del proyecto.
Otra de las capacidades que se analizan en las dinámicas de grupo es la capacidad de comunicación, un ejemplo de este tipo de prueba puede ser el siguiente:
- EL MENSAJE. Se ofrece a cada solicitante un mensaje escrito del cual no puede decir nada al resto del grupo. Cada mensaje consiste en contactar con otro de los candidatos y transmitirle un aviso por señas, luego se pregunta a cada uno si ha entendido lo que ha expresado su compañero. Se observa especialmente las dotes de comunicación no verbal y el lenguaje corporal de los postulantes al puesto de trabajo.
En todos los tipos de pruebas que podemos encontrarnos en una entrevista hay que tener en cuenta una serie de factores de juego mental que suelen utilizar los seleccionadores de personal.
- Hacer una pausa larga después de una pregunta. Es una estrategia que consiste en que el entrevistador se queda callado y mira fijamente al entrevistado después de hacer una pregunta, de esta forma consigue ponerle nervioso y hace que se le olvide la respuesta que tenía preparada.
- Preguntar sobre nuestros anteriores jefes. A veces, los candidatos se ponen en alerta ante este tipo de preguntas y el lenguaje corporal les delata.
- Preguntar si hemos tenido alguna situación complicada en nuestra vida. Con esta pregunta abierta, observan nuestra actitud ante los problemas y nuestra capacidad de expresión.
Para terminar debemos tener especial cuidado con:
- Hablar de nosotros mismos en tercera persona. Hay quien tiene esta costumbre y por sí sola no significa nada, pero hay entrevistadores que pueden malinterpretar este hecho y relacionarlo con la falta de interés en adquirir responsabilidades.
- El tipo de adverbios que empleamos. Hay adverbios como: jamás, peor, probablemente y sobre todo siempre y nunca, cuyo uso continuado se puede interpretar como falta de confianza en nosotros mismos.
- Los tiempos verbales que utilizamos. Normalmente los tiempos presentes y futuros suelen ser utilizados por personas con menor desempeño laboral, según algunos estudios. Por lo cual es mejor hablar en pasado cuando relatemos nuestra experiencia laboral.
- La voz activa o pasiva. Es preferible usar la voz activa cuando hablamos de nosotros mismos, ya que la voz pasiva se puede interpretar como pedante.
