miércoles, 2 de septiembre de 2015

Solicitar recomendaciones




Poseer recomendaciones puede ser la clave para conseguir ese empleo que deseamos.
Cada vez es más importante el hecho de que tengamos buenas referencias, hoy en día las opiniones lo son todo. Si consultamos el parecer de otros consumidores cuando vamos a comprar un móvil que cuesta 200 euros, imaginad un empresario que se va a gastar mucho más dinero en formar y pagar salarios a una persona. El mundo funciona así, cuando invertimos un capital queremos tener la mayor certeza posible de que resultaremos beneficiados.

¿ A quién podemos pedir referencias?

Normalmente las referencias se las pediremos a nuestro jefe directo, o al encargado o director de recursos humanos de la empresa, pero se puede dar el caso de que también tengamos referencias de compañeros de trabajo, clientes de la empresa e incluso proveedores. Esto último se observa a menudo en la red social Linkedin. En el caso de aquellos que no tienen aún experiencia laboral, pueden pedirlas a profesores u orientadores de prácticas.

¿ Qué contenido deben tener nuestras referencias?

Hay abundantes modelos de cartas de referencias en la red.
Algunos ejemplos son:




Lo importante es que la persona que firme la carta especifique lo siguiente:

- El tiempo que hemos estado trabajando para ellos.

- El puesto de trabajo que hemos ocupado.

- Las funciones concretas dentro del puesto que hemos desempeñado.

- Una valoración positiva de nuestro trabajo.

- Una valoración positiva hacia nuestra persona.

En cualquier caso las referencias no se incluyen en nuestro currículum ni en nuestra carta de presentación, por lo general se entregan solamente a petición de la empresa interesada.

Cuando contactemos con la persona que va a escribir nuestras referencias, seguramente nos pedirá orientación, en este sentido es muy importante que nos hayamos fijado previamente en la cultura y valores que imperan en la empresa en la cual queremos trabajar, de esta forma si nuestra recomendación hace referencia a cualidades que busca el reclutador de personal en su futuro empleado, habremos ganado un punto a nuestro favor. Por ejemplo: imaginemos que optamos a un puesto de jefe de equipo comercial y exigen para este trabajo  poseer capacidades comunicativas y persuasión. Si nuestro anterior jefe afirma en nuestra carta de recomendación que poseemos estas habilidades, tendremos más posibilidades de obtener el puesto.

Es importante recordar también que cuando pidamos referencias, es preferible que lo hagamos mediante una llamada de teléfono o en persona a solicitarlas mediante correo electrónico o Whatsup, de esta forma daremos mejor impresión,  y cuando obtengamos nuestra recomendación, nunca debemos olvidarnos de agradecerla.