Hay muchas personas que han convertido su pasatiempo preferido en su nueva profesión.
La idea parece atractiva, dedicarnos a algo que realmente nos gusta hacer y vivir de ello. El problema que puede surgir al unir nuestro trabajo con nuestra pasión es que ésta dejaría de ser nuestra válvula de escape ante el estrés de la vida diaria.
Así que antes de ponernos manos a la obra y llevar a cabo nuestro proyecto, cabría hacerse algunas preguntas:
- ¿Seguiré disfrutando de mi hobby debiendo finalizar mi trabajo en una fecha límite?.
Para muchas personas el concepto de pasatiempo implica dedicarse a ello cómo y cuándo quiere por lo que destinar muchas horas a la realización del trabajo hace que la actividad en un principio placentera, pierda su atractivo a no ser que vendamos nuestra obra por una fortuna.
- ¿Puedo perfeccionar mi trabajo?
Convertir nuestro pasatiempo favorito en un negocio rentable no ocurre de un día para otro, es necesario ser perseverantes y seguir aprendiendo constantemente, y para ello necesitamos recursos y materiales. Afortunadamente hoy, es fácil conseguirlos gracias a internet.
- ¿Tengo la suficiente creatividad para diferenciarme de la competencia?
Lograr nuestros objetivos depende en gran medida de que seamos lo suficientemente originales y creativos como para concebir nuestra propia marca o sello que nos haga inconfundibles. Para ello deberemos ser perseverantes, aprender y actualizarnos constantemente y diseñar estrategias para darnos a conocer.
- ¿Mi hobby me ayuda a descargar el estrés?
Como he indicado anteriormente tener un hobby para muchas personas es una forma de relajarse, por lo cual al convertir nuestro entretenimiento en actividad laboral debemos buscar otras alternativas de esparcimiento.
- ¿Me afectará la presión económica?
Uno de los condicionantes más importantes a tener en cuenta, es pensar hasta qué punto nos puede afectar y estresar el hecho de tener que ganarnos la vida con nuestro hobby y obtener ingresos económicos de forma periódica.
- ¿Sabré vender mi trabajo?
Hay mucha diferencia entre realizar una obra y disfrutar de ella o regalarla a alguien, que la apreciará, y venderla.
Para tener éxito y vender, primero hay que convencer y para conseguirlo es imprescindible tener confianza en nosotros mismos y saber vendernos.
En resumen. La idea, es aprovechar los recursos que nos brinda internet, sobre todo a través de las redes sociales para salir adelante en la profesión que emprendamos, diseñar una excelente página web que llame la atención de posibles clientes, y ser originales a la hora de difundir nuestro trabajo para que el público llegue a la conclusión de que somos magníficos.
