La imagen que exteriorizamos en una entrevista de trabajo es nuestra carta de presentación, por lo tanto es fundamental que sea lo mejor posible.
Si es importante la apariencia que damos en las redes sociales, imaginad la que damos en una entrevista cara a cara.
A la hora de vestirse para una entrevista de trabajo hay que tener en cuenta varios factores:
- En primer lugar la atmósfera de la empresa y su código de vestuario. Es decir, hay lugares de trabajo en los que impera un estilo conservador en el vestir y otros que son más informales. En cualquier caso debemos informarnos previamente del tipo de ambiente que nos vamos a encontrar, para ello es muy útil buscar en internet, sobre todo en las redes sociales que es donde se suelen ver más fotos.
- El cargo al que aspiramos.
- El lugar geográfico donde se va a desarrollar la entrevista de trabajo. No se viste igual en todas partes. Debemos tener en cuenta las costumbres y la mentalidad que prevalece en el país o la región a donde vamos.
- La entrevista de trabajo no es una pasarela de moda. Hay que evitar colores estridentes y ropa llamativa. Es mejor optar por colores neutros y no abusar de los estampados.
Otros consejos a añadir son los siguientes:
- En caso de que llevemos tatuajes, debemos taparlos y si tenemos piercings, lo mejor es quitarlos antes de entrar a la entrevista de trabajo.
En el caso de las mujeres.
- No ponerse minifaldas, escotes ni ropa demasiado ajustada, y por supuesto nada de colores fluorescentes por muy bronceadas que estemos.
- No usar perfume, a no ser que queramos que el entrevistador nos recuerde como "la del perfume".
- Buscar el equilibrio entre llevar ropa acorde con nuestra personalidad que transmita profesionalidad y no sentirse disfrazada.
- Es preferible llevar el pelo recogido que suelto.
- Mejor llevar manga larga o francesa, nunca tirantes.
- Los zapatos, siempre relucientes, mejor zapato cerrado que sandalias y nada de botas ni de plataformas.
- No llevar pantalones capri o pirata.
- Prestar especial atención a las medias. Hay algunas que se rompen enseguida.
En el caso de los hombres.
- Mejor optar por una camisa que por una camiseta.
- Ir bien afeitados y peinados. Evitar la "barba de dos días".
- En caso de llevar traje, asegurarse de que sienta bien, No debe ser ni demasiado holgado ni estrecho. Si no se está habituado a llevar traje, hay que prestar especial atención a ciertos gestos delatores como aflojarse la corbata o estirar las mangas de la chaqueta. Esto es algo que se debe evitar una vez hemos salido de casa.
- Resulta preferible reservar los colores oscuros para el pantalón y en su caso, la chaqueta y los colores claros para la camisa.
- Evitar las chaquetas de cuero y las parkas. En caso de no ir vestido de traje, resulta más indicada una chaqueta tipo blazer.
- Prestar atención a los zapatos. Es mejor optar por calzado cerrado y asegurarnos de que está limpio.
En todo caso, debemos tener en cuenta que nunca hay una segunda oportunidad para una primera impresión.
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